La "presidencialitis" en su máxima expresión. Mientras el oficialismo está esperando el próximo miércoles 25 para proclamar a Javier Velásquez Quesquén como su mejor carta para asumir la presidencia del Congreso a partir del 26 de julio, la oposición se encuentra absolutamente dividida y las propuestas se cuentan casi como número de bancadas hay en el Parlamento.La polarización de los opositores al aprismo es tal que hay hasta siete precandidatos que tientan la conducción del Poder Legislativo.Anoche la dirigencia nacional del Partido Popular Cristiano (PPC) convocó, en un conocido chifa de Miraflores, a sus siete legisladores para empezar la deliberación sobre si presentan candidato propio. Hasta ahí nada peculiar. La novedad es que la tantas veces voceada precandidatura de Javier Bedoya de Vivanco no estaría corriendo sola sino que le habría aparecido una competidora de peso, nada menos que Lourdes Alcorta.Y mientras Raúl Castro prefiere esperar el mejor momento para tentar alguna vicepresidencia del Parlamento, su correligionario Martín Pérez no habría ocultado su pretensión personal de acceder también a este puesto en la próxima directiva.