Mientras que en el Congreso un cartel con la frase "García demagogo" despertaba la ira de los apristas, en el distrito de Pucuto, en Huancavelica, el presidente Alan García remarcaba, coincidentemente, la importancia de no caer en la demagogia."Nunca hay que caer en la demagogia ni en el engaño. Se necesita producción, inversión, capital para desarrollar riquezas y a ese capital cobrarle impuestos y con esos impuestos extender todos los servicios que se necesitan", afirmó el jefe del Estado.García aprovechó también para --"hablando en nombre del partido del pueblo"-- enviarle un mensaje tácito a sus correligionarios, quienes --producto de la competencia partidaria por alcanzar la presidencia del Congreso-- frustraron el debate de vitales reformas constitucionales en estos últimos días de legislatura."Le hablo a la juventud del Perú, la que cree que los capítulos del ayer tienen que irse cerrando para abrir su futuro porque un país que se entretiene mirando siempre hacia atrás no avanza, está condenado a estar en las luchas de atrás, en las discusiones de ayer. ¿De qué sirve eso para los muchachos? Tenemos que dejar un país grande y creciente, avanzando para los jóvenes. Ese es mi compromiso y eso no lo van a hacer los viejos comprometidos en cosas y en odios pasados. Este es el país de la juventud que queremos poner en marcha", enfatizó.