La eliminación del subsidio a las gasolinas de 95 y 97 octanos, que aprobara la semana pasada el Ejecutivo, resulta ser ahora el primer paso en su decisión de, en general, ya no seguir evitando que las alzas en los precios internacionales del petróleo se reflejen en general en el resto de derivados que se comercializan en el mercado interno.Ayer, el ministro de Economía y Finanzas, Luis Carranza, comentó que si bien el Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles ha servido para amortiguar los efectos del alza del crudo, en un escenario en que la cotización del petróleo sigue en alza, "evidentemente algunos combustibles van a tener que ir saliendo de este fondo".