En las últimas semanas se ha discutido largamente sobre la conveniencia de que el Perú tenga una ley de regalías mineras.La mayoría de analistas coinciden en que esta ley no es beneficiosa para el Perú.es, además, inoportuna por darse en una coyuntura en la que nuestro país requiere urgentemente de nuevas inversiones y no ahuyentarlas.Lamentablemente, aun cuando altos funcionarios del Gobierno han manifestado su desacuerdo con esta ley, el Poder Ejecutivo ha anunciado públicamente su decisión de abdicar de su facultad constitucional para observar la ley, bajo el pretexto de sugerir su posterior modificación, con lo cual esta norma ya es una penosa realidad.Nos enconetramos ante una ley plagada de errores que generará muchas dificultades en su interpretación y aplicación, señala el Estudio de Abogados Rodrigo, Elías & Medrano.
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