A pesar de la negativa que expresara el ministro de Energía y Minas, Juan Valdivia, a que el gas natural de Camisea sea exportado a Chile, ayer el presidente Alan García dejó abierta la posibilidad de que ese combustible también pueda beneficiar al vecino país del sur.Según el diario La Tercera, de Chile, el Jefe de Estado peruano hizo este ofrecimiento, durante una reunión que sostuviera el pasado 7 de abril, en Palacio de Gobierno, con el consejo empresarial chileno-peruano, integrado por Hernán Somerville, Sven von Appen, Juan Mackenna, de Sigdo Koppers, y Lázaro Calderón, de Ripley.En la reunión, según el referido diario chileno, que citó como fuente al abogado y miembro de ese consejo empresarial, Eduardo Rodríguez Guarachi, el presidente García se abrió a enviar gas a Chile y alentó a desarrollar inversiones en esa dirección.Precisó que Rodríguez planteó al mandatario peruano que, bajo la idea de que las relaciones bilaterales no giren exclusivamente en torno a la demanda limítrofe en La Haya, capitales de ambos países podrían asociarse para instalar una planta generadora de electricidad en Perú que, aprovechando el gas de Camisea, provea de esa energía a Chile.