ESCÁNDALO DEL BANMAT: FONAFE DEBE ASUMIR SU RESPONSABILIDAD
16 de abril de 2008

Ante el grave escándalo de corrupción en el Banco de Materiales (Banmat), ha sido correcta y oportuna la decisión del presidente Alan García de cesar de inmediato al directorio, cerrar la entidad por dos días y ordenar una investigación prolija.Pero, las cosas no pueden quedar aquí. Claro que debe investigarse las irregularidades del Banmat, la presunta corrupción de sus funcionarios para adjudicarse irregularmente préstamos y utilidades, así como proceder a las sanciones administrativas y penales que corresponda.Sin embargo, lo ocurrido sería solo la punta del iceberg de un problema mayor, que demanda la revisión urgente del mismo sistema de empresas públicas, a cargo del Fondo Nacional de Financiamiento de la Actividad Empresarial del Estado (Fonafe), que no está funcionando bien y al que hay que pedirle cuentas sobre lo sucedido.¡Algo huele muy mal aquí! Se trata del organismo que incluye a entidades de gran envergadura, como Petro-Perú, Sedapal, Enapu, el Banco de la Nación, Electro-Perú y otras empresas eléctricas estatales, que consolidan uno de los holdings con más activos y con mayor presupuesto del país. No obstante, a diferencia de las empresas privadas del mismo nivel, cuyas acciones se negocian en bolsa y deben publicar sus balances de modo periódico y transparente, nadie sabe cómo funcionan las empresas del Fonafe ni qué se hace con el dinero de todos los peruanos.