La oficina del secretario de la Federación Minera, Luis Castillo, ubicada cerca de la Plaza Bolognesi, es angosta y pequeña pero registra un gran movimiento. A cada minuto entran y salen trabajadores mineros, lo que evidencia la fiebre de sindicalización por la que atraviesa este sector. Hoy el gremio anuncia un nuevo paro (para el 12 de mayo) y a propósito de esta noticia conversamos con Castillo, quien asegura que no hay voluntad para mejorar la calidad del empleo del trabajador minero. Aquí sus impresiones.Se ha criticado a la federación por anunciar un paro nacional ad portas de la cumbre ALC-UE, sobre todo porque --según algunos miembros del Ejecutivo-- no hay sustento. ¿Es eso verdad?Totalmente falso, y le digo por qué. Nuestro sector es uno de los que más aporta en los ingresos del Gobierno, sin embargo los trabajadores mineros trabajan en condiciones muy precarias y no se hace nada por mejorar su situación. Ha pasado casi un año desde que suscribieran el acta con el Ministerio de Trabajo, ¿y qué se ha resuelto? Prácticamente nada. El Gobierno no demuestra voluntad política y, por el contrario, faltó a su palabra: de los ocho puntos conversados ninguno se convirtió en ley.¿En qué consistía esa plataforma de demandas?Entre las principales están el tema de la jubilación anticipada, la nueva distribución en el pago de utilidades y la regulación de la tercerización. En el sector ha proliferado la contratación y subcontratación, sin ningún control, lo cual ha precarizado el empleo y las condiciones de vida de un trabajador minero.