El presidente regional de Puno, Hernán Fuentes, estuvo en Lima y vaya si causó revuelo con sus declaraciones, pues --entre otros aspectos-- aseguró que la región altiplánica se encuentra en un proceso para independizarse del Perú.Aunque intentó bajar la temperatura de sus afirmaciones al señalar que la insurgencia es un derecho constitucional, sus declaraciones fueron rápidamente rechazadas por el presidente del Consejo de Ministros y por el titular del Congreso de la República. El jefe del Gabinete Ministerial, Jorge del Castillo, fue el primero en contestarle. "Si el señor presidente regional de Puno, que de paso creo que no llega ni al 5% de aprobación en su propia región, pretende hacer un Estado separado, (se trata) entonces de una actitud sediciosa contra el Perú, una actitud separatista".Según Del Castillo, esto explicaría la reciente decisión tomada por Fuentes de aprobar una norma en favor los cultivos de hoja de coca y su rebeldía ante las normas para la contratación de docentes.El jefe del Gabinete agregó que Fuentes "tiene una dependencia ideológica del extranjero que es muy lamentable", en alusión a la abierta simpatía que profesa al régimen del presidente venezolano Hugo Chávez.