La Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) -organismo de las Naciones Unidas encargado de velar por el cumplimiento de los tratados internacionales sobre drogas- demandó a los gobiernos de Perú y de Bolivia que prohíban a sus ciudadanos masticar hoja de coca y beberla en infusiones, y les exigió mayores esfuerzos para erradicar ambas prácticas.En su Informe Anual sobre las Drogas 2007, dicha entidad exhortó a ambos gobiernos a que adopten "medidas sin demora con miras a abolir los usos de la hoja de coca que sean contrarios a la Convención de 1961, incluida la práctica de masticarla".Asimismo, pidió que Perú y Bolivia piensen en un cambio legal para abolir la fabricación de otros productos que contengan alcaloides de la coca.