El programa de ayuda para los más pobres que está diseñando el Gobierno peruano es una inversión cuya recompensa será la reducción de la pobreza y la creación de capital social a futuro, sostuvo ayer el Banco Interamericano de Desarrollo (BID)."Los resultados obtenidos en otros países donde se ha aplicado este tipo de programa nos muestran que esta inversión vale la pena. Es una inversión a futuro que tiene una recompensa muy clara: reducir la pobreza y crear capital social", afirmó el representante del BID en el Perú, Christof Kuechemann.El funcionario destacó que estos programas de ayuda directa no son regalos ni subsidios, sino transferencias condicionadas porque la población que recibe la ayuda económica asume el compromiso de que sus niños acudan a los centros de salud y asistan a las escuelas.
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