Un contundente "no" dijeron unos 200 campesinos de las comunidades de Quispicancha y Ccachatay, distrito de Seclla (Huancavelica) al inicio de trabajos de explotación minera por parte de la compañía Pampamali.Para manifestar su rechazo bloquearon las vías de ingreso al lugar con troncos y rocas durante un paro de 48 horas que denominaron cívico y que se inició el sábado por la madrugada. Cabe recordar que en el lugar la minera tiene planeado extraer polimetálicos.En todo el distrito de Secclla las viviendas amanecieron embanderadas en apoyo a la protesta y hubo cierrapuertas total de establecimientos comerciales. Según las autoridades locales la explotación minera contaminará el medio ambiente perjudicando la agricultura y ganadería."No dejaremos actuar a la minera. Si es posible con nuestras vidas defenderemos las tierras de nuestras comunidades", manifestaron los dirigentes comunales a sus autoridades.Para evitar desmanes la subprefectura solicitó refuerzos policiales al distrito de Congalla, distante a unos 10 kilómetros. Desde allí se trasladaron al lugar del conflicto unos veinte efectivos del orden.