Perú Copper, propietaria del proyecto cuprífero Toromocho, ubicado en Junín, invertirá cerca de US$100 millones en la remediación de los pasivos ambientales que deberá afrontar antes de iniciar sus operaciones. Según informó Walter Díaz, responsable de Asuntos Ambientales de la minera, la primera gran inversión es en la descontaminación de las aguas del túnel Kingsmill, para lo que destinarán US$24 millones.Aguilar indicó que, además, requerirán US$30 millones para trasladar la ciudad de Morococha (que colinda con el proyecto) a una nueva zona, con la finalidad de que la población no se exponga a la operación.La minera está a punto de culminar su estudio de impacto ambiental que le permitirá desarrollar un estudio de factibilidad definitivo del proyecto y determinar así la inversión real que de-sembolsará en Toromocho.