La gran mayoría de la población de la provincia tacneña de Candarave le dijo "no" al inicio de nuevas actividades mineras, a través de una consulta popular realizada ayer. Rechazó así el uso del recurso hídrico para la exploración o explotación minera.El 90% de los habitantes de esta provincia altoandina se pronunció en contra de la actividad minera. El rechazo expresado por su voto es una respuesta a los excesos cometidos por Southern Copper y la explotación del agua superficial y subterránea de la zona. Los pobladores culpan a la empresa trasnacional por la contaminación del agua y la sequedad que existe en sus campos de cultivo.