El conflicto generado alrededor de la minera Majaz en Piura vuelve a cobrar signos de violencia, mientras la mesa de diálogo encabezada por el premier Jorge del Castillo para enfrentar el tema sigue estancada. Luego que la compañía denunciara que un grupo de comuneros atacó una de sus instalaciones con una bomba molotov, ayer campesinos opositores a Majaz realizaron plantones en la carretera que conduce al proyecto minero para impedir el pase de los vehículos que transportaban a campesinos que respaldan a la empresa para que hoy protagonicen una marcha a favor de Majaz en Huancabamba.Así lo aseguró el vicepresidente de la comunidad de Segunda y Cajas, Eusebio Guerrero Pintado. "Majaz nos sigue provocando al continuar en nuestras tierras ilegalmente y la población por propia iniciativa se está levantando de nuevo para no dejar pasar a los comuneros pagados por la mina", dijo el dirigente.