La polimetálica Compañía Minera Atacocha se ha fijado como meta diversificar su cartera. Así, a su reciente ingreso a la exploración y explotación de oro, decidió añadir el negocio de la generación eléctrica, y para ello adquirió los derechos del proyecto Quitaracsa, ubicado en Áncash. Dicho proyecto pertenecía a la empresa S&Z, que lo diseñó en dos fases de aproximadamente 100 megawatts (MW) cada uno (en conjunto superan a las plantas de gas natural instaladas en Chilca). S&Z es también propietaria del proyecto hidroeléctrico Tarucani, en Arequipa. Para la compra del 92% del proyecto, Atacocha usó su filial Empresa Energética de Chaprín.Manuel Montori, director de Minera Atacocha y presidente de Empresa Energética de Chaprín, indicó que esperan iniciar en abril del próximo año la construcción de la primera fase de Quitaracsa, con la que ingresarían al sistema eléctrico 114 megawatts, lo que la convertiría en un operadora relevante en este sector.