El gobierno reconoció ayer que la eventual firma de contratos con la petrolera estatal venezolana PDVSA puede generar en algún momento un intento de presión o injerencia por parte del presidente de Venezuela, Hugo Chávez. El primer ministro, Jorge del Castillo, señaló que ante ello se debe contar con planes de contingencia. "Es posible (que haya problemas), hay que analizar las cosas en su contexto y nada más. Uno puede tener una relación comercial, pero que ello no te haga dependiente de nada, y siempre tener planes de contingencia. No funciona una cosa, se tiene la otra. Estos son temas ante los cuales, desde el gobierno, hay que tomar las mejores decisiones", comentó Del Castillo en entrevista radial.