Las interpretaciones en torno a un proyecto de ley planteado por el Poder Ejecutivo, en el que se propone la simplificación del juicio oral y que presuntamente beneficiaría directamente a Alberto Fujimori –según advirtieron ciertos analistas–, generó la inmediata reacción del presidente Alan García Pérez. El Mandatario no sólo calificó ayer como “maligna y exagerada” dicha versión, sino que además sostuvo que se trata de una interpretación torpe. Bastante enérgico, tras inaugurar el programa Los mil y un panes del Perú, en el distrito de Jesús María, García negó que el proyecto pretenda evitar que Fujimori responda por los delitos que se le acusa. Por el contrario, señaló, lo que se busca es acelerar y dar simplificación a los procesos. "Nosotros no haríamos nada para beneficiar a una persona, simplemente si esto se acelera, las sentencias vendrán más rápido", sostuvo. (Domingo)