Temen por sus vidas. Dirigentes de las comunidades de Ccochatay y Quispicancha, en el distrito de Secclla, provincia de Angaraes (Huancavelica), denunciaron en Lima que son amenazados de muerte y con la quema de sus hijos por apoyar el reinicio de las operaciones de la minera Pampamali.Los dirigentes Fulgencio Salvatierra Arango, Donato Díaz Ordóñez y Rómulo Cosinga Arango manifestaron que más de 700 familias enfrentan este problema en la actualidad. Salvatierra señaló que "por el solo hecho de trabajar con esa empresa sufrimos amenazas de muerte no solo contra nosotros sino también contra nuestros hijos, advirtiéndonos en forma anónima que si no cambiamos de actitud, los van a quemar vivos en nuestra presencia".