En nuestro país, con el inicio del proyecto de Camisea se dieron numerosas ventajas, considerando que es un recurso limpio y tiene un precio menor al de cualquier otro combustible. Y lo más importante es que su consumo viene registrando niveles sorprendentes y ya está superando las proyecciones del gobierno. Así, la demanda de gas natural en el Perú, en lo que va de este año, ha aumentado más de lo previsto por el Ejecutivo, sobre todo por el mayor requerimiento de ese combustible por parte de las plantas térmicas generadoras de electricidad. Si el 2006, el consumo promedio por día de ese combustible para los diversos tipos de consumidores (eléctrico, industrial, vehicular y residencial) alcanzaba los 100 millones de pies cúbicos diarios; hoy, según estimaciones del Osinergmin , está alcanzando los 260 millones, es decir registra un crecimiento de 160%.