Al presidente Alan García le cayeron bastante mal las críticas que recibió el relanzamiento de la Oficina Nacional Anticorrupción (ONA) y le sentó peor que uno de los críticos fuese Genaro Matute Mejía. Por eso, ayer, el mandatario respondió cuestionando la idoneidad del contralor general de la República y acusándolo de no haber hecho nada frente al derroche de gastos en el que incurrió Alejandro Toledo en Palacio de Gobierno."Parece que el contralor era muy amigo del gobierno anterior y ahora sí hace críticas. Recuperó la lengua en este gobierno. Es una cosa extraña. En este palacio se hicieron gastos exorbitantes, groseros, terribles, que cualquier contralor en el mundo hubiera podido advertir y hubiera podido evitar. Y no se hizo", afirmó.Como se recuerda, Matute -al igual que el presidente del Poder Judicial, Francisco Távara- cuestionó la creación de la ONA, señalando que con el nombramiento de su titular, Carolina Lizárraga, se estaban duplicando funciones y que lo que debió hacer el Ejecutivo es fortalecer las instituciones encargadas de este tema.Ayer, el jefe del Estado argumentó que es precisamente la poca eficacia de la Contraloría y del resto de entidades una de las razones por las que se creó esta nueva oficina.