En momentos en que varios de sus ministros han sido convocados por el Congreso para dar explicaciones sobre determinados temas, para ser interpelados y hasta para enfrentar una moción de censura, el presidente Alan García consideró que los miembros de su gabinete son tratados en el Parlamento como "trapos de cocina".Por ello, el jefe del Estado hizo una invocación a la oposición para no llevar la política a un nivel de "cantina de gresca".En Palacio de Gobierno, el jefe del Estado consideró que las interpelaciones y llamados a rendir cuentas ante el Congreso son parte de la democracia, pero añadió que la población también se da cuenta cuando estas convocatorias a los ministros se hacen con mala intención y por politiquería. García defendió la gestión de sus ministros del Interior, Luis Alva Castro y de Salud, Carlos Vallejos.(Edición domingo).