El extraditado Alberto Fujimori Fujimori admitió ayer haber ordenado el allanamiento ilegal de la casa de Trinidad Becerra, esposa de Vladimiro Montesinos, en noviembre del 2000. Sin embargo, se justificó diciendo que lo hizo durante la operación policial para detener a su entonces asesor Vladimiro Montesinos.Esta confesión sorprendió ayer al vocal instructor Pedro Urbina Ganvini y al fiscal José Pereyra, quienes lo interrogaron por dos horas en la diligencia reservada que empezó a las 2:00 p.m. y concluyó a las 4:00 p.m. en la sede de la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes) de la PNP. Durante la audiencia, que se desarrolló sin mayores sobresaltos, Fujimori respondió más de 30 preguntas.De esta forma el extraditado se declaró parcialmente responsable del delito de usurpación pública, por el que fuera extraditado de Chile y por el que recibiría siete años de prisión, según lo solicitado por el fiscal Pereyra. Fujimori negó, durante el interrogatorio, que hubiera ordenado el allanamiento ilegal para sacar videos de la corrupción que se encontraban en los dos departamentos de Trinidad Becerra en San Isidro.(Edición sábado).