A pesar de la calma que tratan de transmitir los miembros del Consejo de Ministros, y de ese mantra repetido a los medios de que la evaluación anunciada por el premier Jorge del Castillo es algo habitual (y por lo tanto no tiene que suponer cambios traumáticos en el gabinete), nadie puede negar que son tiempos movidos en el equipo de gobierno de Alan García.No obstante, ninguna de las dos cabezas puestas en bandeja al mandatario en las últimas semanas, la de los ministros de Interior y Salud, Luis Alva Castro y Carlos Vallejos, respectivamente, caerán. Al menos en forma inminente, según fuentes altamente confiables consultadas por La República. La duda, sin embargo, no fue despejada hasta la noche.Durante el día de ayer dos fueron los rumores que circularon fuertemente por las redacciones, y ambos hablaban de cartas de renuncia de los ministros. En el caso de la supuesta misiva de Alva Castro, además, se dijo que esta incluso habría sido aceptada por Alan García, y que se haría pública si es que el titular de Interior era finalmente censurado por el Congreso. Algo que finalmente no sucedió.