CONFIEP: CUIDADO CON LA FRACTURA
2 de febrero de 2005

Es preocupante que, contra sus reiteradas invocaciones al Gobierno y la clase política para consolidar la institucionalidad democrática, el principal gremio empresarial se halle envuelto en una crisis interna que solo contribuiría a erosionar su representatividad.El detonante, esta vez, ha sido la pretensión de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE) de acceder a la presidencia de la Confiep, lo que fue materia de un acuerdo verbal el año pasado. A ello se opone la Asociación de Administradoras de Fondos de Pensiones (AAFP), que ha decidido postular también al máximo cargo.Habida cuenta del anterior alejamiento de dos gremios importantes como la Sociedad Nacional de Industrias y la Cámara de Comercio de Lima, la salida de la SNMPE tornaría muy delicada la situación, pues se acentuaría la tendencia a la dispersión y la proliferación de gremios. ¿Es que acaso no se dan cuenta de que con esto se afectaría gravemente la unidad del empresariado, su representatividad y el peso de su opinión?El momento es de lo más inoportuno para un eventual cisma. Sería una pena que los empresarios, precisamente cuando deberían estar más unidos que nunca y tienen una mayor y respetada presencia política, corran el riesgo de echar por la borda su importante concurso como interlocutores decisivos de la estabilidad política y económica del país.En este contexto, debemos reiterar nuestra invocación a la cordura. Los empresarios deben sopesar los pros y los contras de su actuación, para superar estos malentendidos. La SNI y la Cámara de Comercio tienen que reflexionar sobre esta situación y analizar seriamente su posibilidad de retorno al seno de la Confiep.En cuanto a la SNMPE, debe buscarse una salida razonable e institucional para superar la situación actual, pues es mucho lo que puede perder de confirmarse su salida de la Confiep. No solo porque se trata de un sector que ha adquirido enorme peso en la economía nacional, sino por la delicada coyuntura que atraviesa la nación y por las necesarias señales de unidad y de fortalecimiento de la institucionalidad en todo sentido.