Un mes después del terremoto que castigó nuestro país, el balance es indudable: la opinión pública reconoce con toda justicia la labor desplegada por la ayuda internacional, la población en general y la conjunción de esfuerzos del Estado y el sector privado en apoyo a las víctimas de la tragedia.El aporte de estos estamentos ha sido claro, según lo ratifica la última y auspiciosa encuesta nacional de El Comercio realizada por Ipsos Apoyo Opinión y Mercado. Y es que entre otras lecturas comprueba una vez más que los peruanos somos capaces de consolidar cadenas solidarias y eficaces ante la adversidad, siempre que sepamos comprometer la participación de todos los involucrados con sus potencialidades, fortalezas y oportunidades.Evidentemente, en este balance no todos salen bien parados. Es el caso del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) que, a pesar de ser la entidad pública rectora en casos de emergencia nacional como la que hemos vivido, ha demostrado estar mediana mal o muy mal preparado para enfrentar las consecuencias de un sismo como el del 15 de agosto. Esa es la percepción ciudadana.En una situación diferente, en cambio, se halla el empresariado. El 87% de los encuestados aprueba el apoyo que brindó a las víctimas, 95% cree que es positivo para la población que colabore con el Estado en el proceso de la recuperación de las zonas afectadas, y 83% está de acuerdo con la creación del fondo de reconstrucción (Forsur). Asimismo, tan exitosa se ha visualizado la sinergia Estado-sector privado que la ciudadanía espera que esa colaboración se repita en otros campos, como la mejora de la salud, de la educación y de la justicia, la seguridad ciudadana, la construcción de redes de agua y desagüe, así como de carreteras, y el fomento al turismo.El gobierno actual debe tomar apunte de las actitudes de la población, reveladas en esta encuesta, a la hora de aplicar las políticas públicas que el país está esperando, tanto para superar la crisis que vive el sur a raíz del terremoto, como para enfrentar otros graves problemas nacionales.