Sin duda, los conflictos sociales han sido el tema central de la Vigésima Octava Convención Minera, que, luego de una semana de planteamientos y diagnósticos de la situación del sector, concluyó ayer en esta ciudad. Jaime Quijandría, presidente de la convención, indicó a modo de conclusión que el sector debe afrontar su relación con la sociedad de manera más planificada. "El planeamiento es ver nuestros retos y desafíos y saber cómo encarar los problemas", señaló. En el discurso de despedida, dijo que el principal aporte de esta actividad ha sido plantear la mejor manera de "recomponer la relación de la sociedad con la industria minera". Agregó que una de las metas es que el sector intente recuperar la confianza de la sociedad. Se hizo hincapié en la falta de confianza de la población, no solo con el sector minero, sino también con las autoridades que fiscalizan, como el Ministerio de Energía y Minas, lo que fue reconocido por el ministro Juan Valdivia.Aparte de este tema, Quijandría ofreció un esbozo de lo que fueron las conclusiones de la convención. Sin embargo, mencionó que se había encargado al ex presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE) Ricardo Briceño que presente las principales recomendaciones para enfrentar el problema social y otros aspectos que afectan el sector --es decir, los resultados de los debates de la convención-- a la Presidencia del Consejo de Ministros. Además, indicó que se formará un grupo de trabajo que evaluará cómo debe aprovecharse la bonanza minera en aspectos sociales.(Edición sábado).
- [El Comercio,Pág. B 4] /