Los dirigentes de las comunidades de Segunda y Cajas (Huancabamba) y de Yanta (Ayabaca), sobre cuyos territorios se realizaría la explotación del proyecto minero de Río Blanco, anunciaron ayer que en sus respectivas asambleas de comuneros acordaron rechazar el ofrecimiento de $ 80 millones por parte de minera Majaz.Así lo manifestaron el fiscal de la comunidad de Segunda y Cajas, Edilberto Neyra Alberca, y el presidente de la comunidad de Yanta, Senecio Jiménez Peña. Para ellos, el fondo es un insulto pues pretende comprar conciencias, el agua y el territorio que han heredado de sus ancestros.El abogado Quique Rodríguez, asesor del Frente por el Desarrollo Sostenible de la Frontera Norte, quien promueve la consulta sobre minería para el 16 de setiembre, sostuvo que en la propuesta de Majaz se condiciona la entrega de 1 millón de dólares a los comuneros, a la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental.