La falta de un empadronamiento eficaz y rápido explica el por qué de la situación en la que viven hasta ahora los refugiados de El Obelisco. Según Guy Gauvreau, representante del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA) en el Perú, el proceso de empadronamiento de las víctimas fue lento al inicio de la tragedia. Las autoridades locales de la ciudades afectadas no reaccionaron a tiempo, tampoco lo hizo el Gobierno Central, por lo que la desesperación se apoderó de quienes clamaban ayuda.