Una muerte más que lamentar. El niño Víctor Ramos Pasache, de 12 años de edad, falleció ayer en el distrito iqueño de Guadalupe aplastado por una pared que se derrumbó tras la fuerte réplica de 5.7 grados en la escala de Richter producida a las 3:11 p.m. y que causó pánico entre la población de Ica, Pisco, Chicha y Lima. El menor recibió un fuerte golpe en la cabeza y, según el diagnóstico de la posta médica donde fue atendido, tuvo un traumatismo encéfalo craneano y una herida contusa en el cuero cabelludo. "Fue a recoger un alicate que dejaron botado y al tiempo que se agachó le cayó la pared. No pudimos hacer nada, al llegar a la posta falleció", narró el primo del menor.