El objetivo de reducir la pobreza está presente no solo en el Perú, sino también en otros países de América Latina. Uno de los caminos para aliviar esta situación se encuentra en la agricultura a través de la producción de insumos que sirvan para la fabricación de productos más elaborados.En ese sentido, el director de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), José Luis Machinea, destacó que la generación de biocombustibles beneficiaría a las zonas agrarias, entre ellas algunas con altos niveles de pobreza en América Latina. El biocombustible es un carburante alterno a las gasolinas porque contamina menos. Los biocombustibles más conocidos son de dos tipos: el etanol, que se obtiene principalmente de la caña de azúcar y del maíz, y el biodiésel, que se produce a partir de la canola y otros granos oleaginosos.(Edición sábado).