Pedían de todo. Desde la suspensión del TLC hasta la devolución del dinero a los fonavistas, pasando por la homologación del sueldo de los catedráticos, el rechazo a las concesiones mineras y la defensa de la soberanía nacional. La jornada de protesta convocada por la Confederación Nacional de Trabajadores del Perú (CGTP) se tradujo en seis horas de movilización, que sirvieron de vitrina para diversos políticos, y durante las cuales se coreó distintas reivindicaciones gremiales. Manifestantes de la CGTP y del Sutep se desplazaron desde las 10 a.m. por las avenidas Arequipa, Petit Thouars, Javier Prado y Salaverry y se dirigieron a la plaza Dos de Mayo. Unos quinientos obreros de construcción civil, con palos y fierros, se concentraron en la Av. Angamos para luego avanzar en la misma dirección. En el trayecto intentaron causar destrozos en una edificación abandonada ubicada en la cuadra 23 de la Av. Arequipa, pero fueron repelidos por policías.Según el ministro del Interior, Luis Alva Castro, unos 15.000 policías fueron asignados para resguardar toda Lima, mientras que la misión de los miembros de las Fuerzas Armadas fue vigilar el aeropuerto, las centrales eléctricas y las plantas de tratamiento de agua.