Consciente de que comienza una semana llena de protestas y de que en el centro de todas ellas estarán los maestros del Sutep, el presidente Alan García aseguró ayer que su gobierno no le tiene miedo ni a los gritos ni a las marchas y que está dispuesto a enfrentar "cualquier cosa" en su afán por mejorar la calidad de la educación en el país.En Villa María del Triunfo, donde hizo entrega del título de propiedad número cien mil, el jefe del Estado recordó a los cientos de pobladores congregados que los escolares peruanos terminaron en el último lugar en la evaluación internacional de calidad educativa que se realizó hace algunos años y sostuvo que gran parte de ello se debía a que los docentes están mal preparados. "Y si sabemos que esto es verdad, ¿por qué vamos a seguir engañando a nuestros hijos? ¿Por qué vamos a seguir dándoles una educación de poca calidad? ¡Por eso nos enfrentamos a cualquier cosa por mejorar la educación! ¡Por eso no nos atemorizan ni los gritos ni las marchas! ¡Hay que capacitar a nuestros maestros!", afirmó, con energía.