Un grupo de líderes religiosos de diversas confesiones (católica, luterana y evangélica), encabezados por el arzobispo de Huancayo, monseñor Barreto, solicitó a Doe Run Perú una salida ética a la grave crisis de salud de La Oroya y la cuenca del Mantaro. Esto implicaría que la empresa deba acelerar sus inversiones para modernizar el complejo metalúrgico y reducir la emisión diaria de dióxido de azufre y plomo en esa ciudad. (Edición sábado).