La primera señal de alerta comenzó cuando Renovación Nacional (RN) comenzó a manejar en el Congreso una agenda propia. Un hecho que si bien generó no pocas molestias entre algunos miembros de Unidad Nacional (UN) -especialmente en los independientes- no tuvo ningún tipo de consecuencia partidaria para la agrupación de Rafael Rey, que continuó como parte de la alianza pero cada vez más despegada de la misma.Fue una fisura que ahora comienza a convertirse en grieta. La actitud de Renovación no era gratuita, ya que el sábado el congresista del Partido Popular Cristiano (PPC) Javier Bedoya de Vivanco denunció al Apra y a Rafael Rey de tratar de desaparecer Unidad Nacional. Renovación Nacional estaría, en efecto, tratando unitariamente de fortalecer su presencia en el Congreso e incluso de crear una bancada propia para negociar cara a cara con el gobierno del presidente Alan García.