Al chaleco del ministro Juan José Salazar todavía no le entran balas, pero nadie puede apostar que seguirá siendo tan efectivo. El presidente Alan García enfatizó ayer que no está evaluando su continuidad en el Gabinete Ministerial, no obstante el último de sus deslices; es decir, la firma de un acta con campesinos cocaleros cusqueños en la que supuestamente comprometía al Gobierno a retirarse de la Convención de Viena.Sin embargo, minutos después, el presidente del Consejo de Ministros, Jorge del Castillo, no fue tan contundente: "No tenemos aún una definición (...) Vamos a escucharlo, porque ha estado en el Cusco y recién ha regresado".En lo que García y Del Castillo sí estuvieron de acuerdo fue en que el titular de Agricultura cometió un error. "Lo es en la medida en que él (Salazar) debió limitarse a transmitir lo que escuchaba de los campesinos cocaleros. Ellos pueden pedir muchas cosas, pero es muy diferente lo que el Gobierno decida", sostuvo el mandatario.(Edición sábado).