El presidente Alan García desestimó ayer las versiones de un supuesto resurgimiento del terrorismo en el país y se mostró despreocupado de supuestas amenazas contra su vida, según lo advirtió un informe de Inteligencia del Ejército difundido por un programa televisivo. Tras encabezar una ceremonia de entrega de llaves en el condominio Del Aire en San Luis, García dijo no sentirse "sicoseado" por supuestas llamadas telefónicas amenazantes a Palacio de Gobierno por parte de supuestos integrantes del MRTA y las FARC, como se propaló en el referido informe. "El político que tiene miedo físico deja de ser político, yo estoy segurísimo, tengo muchos años en la política como para que me sicoseen ningún servicio de Inteligencia, ningún informe o ningún periodista", remarcó.