Antauro Humala, quien insiste en negar su responsabilidad en la muerte de cuatro policías, manifestó en su declaración preliminar que organizó la revuelta en Andahuaylas por estar cansado de la corrupción y el caos en la política y en las FF.AA."La misión era la toma de la comisaría, pero sin matar a nadie", precisó en el interrogatorio, según fuentes policiales consultadas ayer.Humala detalló que la toma empezó en la mañana del 31 de diciembre cuando personal encubierto supo el número de policías y cuántos estarían de servicio esa noche, en una fiesta costumbrista.Ya en Año Nuevo, unos humalistas se hicieron pasar como ciudadanos que iban a asentar una denuncia y, aprovechando que algunos policías bebían y otros no estaban en sus puestos, los redujeron. Luego se apoderaron del local y tomaron de rehenes a 17 agentes. "No hubo un solo disparo", afirmó Humala.(Edición sábado).