A diferencia de 2004, este año no habría presiones importantes que pongan en peligro la meta de inflación del Banco Central de Reserva (BCR), fijada en el rango de 1.5% y 3.5%. El Banco Wiese Sudameris proyecta que la variación de precios de la economía será de 1.8% este año, debido a que en 2005 habrá mejores condiciones climáticas que permitirán una mejor oferta de productos agrícolas.Asimismo, estima que los precios de los combustibles tendrán mayor estabilidad, dado el descenso que se espera en la cotización del petróleo. "De generarse presiones deflacionarias, no descartamos que el BCR reduzca las tasas de interés o intervenga más en el mercado cambiario", apunta.