El ex presidente Alberto Fujimori ha retomado sus contactos sociales, políticos y diplomáticos en el Perú, Japón y Chile en procura de evitar su extradición, afirmó ayer un artículo del diario El Mercurio. La nota periodística cita fuentes cercanas al extraditable para afirmar "que hace rato Fujimori dejó de lado sus días de turista para dedicarse ciento por ciento a la actividad política desde su nueva residencia en calle La Luz, en las Condes", cerca de la embajada japonesa en Santiago de Chile. Agrega que esos contactos telefónicos le han permitido establecer en Lima "muy buenas relaciones con el gobierno de Alan García y fortalecer en el Congreso la figura de su hija Keiko".También se afirma que Fujimori "mantiene contacto diario con políticos y altos funcionarios del gobierno nipón", al igual que con empresarios japoneses residentes en Santiago