Jaime Cáceres Sayán comenzó ayer, oficialmente, su trabajo al frente de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (Confiep). Asume como reto la inclusión de nuevos sectores a esta agrupación, entre ellos las microempresas y las pequeñas empresas, las que en algún momento tendrán derecho a voto como cualquier otro gremio asociado. Además sostiene que los empresarios de estos tiempos muestran un mayor interés por los temas sociales y la educación. ¿Qué diferencia encuentra entre el discurso del Alan García de los años 80 y el que dio el martes frente a los empresarios?Fue el discurso de un político maduro, que tiene claro lo que necesita el país: atraer inversión nacional y extranjera como fuente generadora de empleo. El presidente se ha referido a la necesidad de reformar el Estado, de mantener la estabilidad en las políticas para proyectar confianza a los inversionistas. En síntesis, fue un discurso motivador para los empresarios, para sus ministros y para toda la ciudadanía.