La compañía brasileña Petrobrás devolvió a Bolivia un campo de petróleo argumentando el riesgo de no poder recuperar la inversión y por el nuevo régimen tributario impuesto por la nacionalización del presidente Evo Morales.Pero Bolivia atribuye la devolución a que la empresa encontró petróleo, que no le interesa, en vez del gas natural que requiere.El campo devuelto se denomina Irenda, está en el departamento oriental de Santa Cruz, fronterizo con Brasil, tiene una extensión de 25,000 hectáreas y fue adjudicado a Petrobrás en 2003 mediante una licitación pública.(Edición domingo).