Urge actuar ya. El tiempo apremia: según datos oficiales, el año 2009 --¡en 21 meses!-- los requerimientos de agua potable en Lima Metropolitana superarán la capacidad ofrecida. Hay que dar prioridad a la ejecución de proyectos como Marca II, Huascacocha y Pun Run e involucrar al sector privado a través de concesiones.En el Día Mundial del Agua es obligación de los gobernantes reflexionar severamente sobre esta clamorosa realidad de carencia de este servicio básico que afecta a millones de peruanos aún no conectados a la red pública de agua potable y desagüe. Ello los coloca en la paradójica situación de tener que pagar precios exorbitantes por agua de cisternas, cuya calidad es deplorable y atenta contra la salud.Ante esta situación, son criticables las posturas ultrarregionalistas de algunas autoridades como las de Junín que se oponen al trasvase de aguas del Mantaro al Rímac, con lo que bloquean el proyecto Marca II. Lo mismo sucede con los gobiernos de Moquegua y Arequipa, enfrascados en una eterna disputa por el agua. Hay que hacer la diferenci a aquí que una cosa es el agua para riego y otra el agua para consumo humano.El problema es grave y demanda un tratamiento al más alto nivel del Ejecutivo y Legislativo para definir el marco legal y estudiar la alternativa de concesionar los servicios de agua. No se puede esperar que explote el problema para recién actuar. La verdad es que el año 2009, aun si se concluye Marca II, estaremos racionando el agua en nuestras casas.