HUMALISTAS ENTREGARON SUS ARMAS TRAS PEDIR GARANTÍAS PARA SUS VIDAS
5 de enero de 2005

Ayer fue un día de llantos. Los hubo de alegría en la puerta de la comandancia de Andahuaylas, pero su contraparte estuvo en la sede de la Policía Aérea en el Callao.La esposa del mayor PNP Miguel Canga esperaba ansiosa cerca de la comandancia policial de Andahuaylas hasta que por fin pudo ver a su esposo sano y salvo. Sus mejillas fueron surcadas entonces por señales de alegría mientras sus labios sellaban los del esposo que también lloraba por los momentos vividos.Más allá, en una humilde casa, una anciana que no quiso identificarse lloraba amargamente. Se refugia tras su puerta mientras dice que su hijo fue engañado por los humalistas y ahora cargará con una culpa ajena, pues había sido detenido entre los 98 sujetos que se resistían a rendirse tras la captura de Antauro Humala.Luego se conocería que seis humalistas más fueron capturados por la policía cuando trataban de huir al Cusco. Cuatro integrantes más de este grupo cayeron en otra operación. Para sorpresa de todos, dos de ellos eran soldados en actividad.La rendición de los seguidores de Humala se selló luego de que estos gritaran a voz en cuello que querían garantías para sus vidas. Luego de dialogar con las autoridades, estos sujetos formaron, quitaron las cacerinas de sus armas y las colocaron en el piso. Las fuerzas combinadas tomaron el control y el llanto de los familiares de los 19 rehenes se abrió pasó entre las armas para abrazar a sus seres queridos.