La Contraloría General de la República culminará como máximo en tres meses la elaboración de un nuevo sistema cuyo objetivo es mejorar el control sobre las compras del Estado y prevenir irregularidades y casos de corrupción, aseguró el titular de esta entidad, Genaro Matute Mejía. Se trata de los denominados "precios testigos", un sistema a través del cual se fijará un precio determinado para los principales productos que el Estado adquiere, de tal forma que no se pague un centavo más.