El presidente del Consejo de Ministros, Jorge del Castillo, renunció ayer al cargo, asumiendo su responsabilidad política por el arreglo que promovió con la empresa chilena Gildemeister, que a la larga resultó inconveniente, pero el presidente Alan García no aceptó la dimisión y le renovó su confianza, informaron a EXPRESO fuentes del Ejecutivo. Así sucedieron los hechos. La noche del martes, durante el consejillo que suele convocar Del Castillo previo al Consejo de los miércoles -al que no asistió Alva Castro-, el jefe del Gabinete anunció que presentaría su renuncia en la sesión del día siguiente. Ayer miércoles, apenas empezó el Consejo, Del Castillo presentó su renuncia alegando entre otras cosas haber sido desautorizado por el presidente en el tema del Comité Webb. También dijo que se sentía afectado por las palabras de Alva Castro aparecidas en un diario, y cuando iba a ahondar en sus motivos el presidente lo cortó diciéndole que las cosas no eran así y que no había fundamento para una renuncia.