A la reforma del Estado y de la educación, el presidente Alan García ha sumado ahora la necesidad de una reforma laboral que permita a los trabajadores un acceso progresivo a derechos fundamentales como seguridad social, pensión de jubilación, jornada de ocho horas de trabajo y salario mínimo. En un discurso ante desempleados reunidos en Villa María del Triunfo, el Mandatario cuestionó a los sectores que ya contando con un puesto de trabajo se oponen a cualquier alternativa que busque ampliar el acceso al empleo con todos los derechos para quienes no lo tienen. En ese sentido, planteó un diálogo entre el Estado, los trabajadores, desempleados y empresarios para buscar un acuerdo que permita superar este problema.