El Gobierno ha apostado fuerte en la producción de biocombustibles como alternativa al petróleo y a la gasolina, y para ello cuenta con una enorme riqueza natural, pero adolece de campos de cultivo suficientes. Según un cable de EFE, nuestro país dispone de 50 especies de oleaginosas en la selva que pueden ser utilizadas para la producción de biodiésel, mientras que la costa puede producir caña de azúcar, el insumo del etanol, prácticamente todo el año.Sin embargo, los expertos alertan sobre la falta de 200 mil hectáreas que se requieren para cultivar canola -materia prima del biodiesel-, o las cerca de 100 mil hectáreas para el etanol.