La minera japonesa Santa Luisa dejará de pagar al Estado peruano US$ 5 millones en impuesto a la renta, debido a una irregularidad que fue advertida por una firma auditora contratada por el propio Ministerio de Energía y Minas (MEM). El caso es técnico, pero tiene consecuencias que afectarían el bolsillo de los peruanos.Santa Luisa es la única minera que goza de los beneficios de un contrato de estabilidad tributaria bajo el régimen legal antiguo (antes de 1991), que el Estado creó para promover la inversión de la empresa privada mediante la reducción del pago de impuestos, entre otros incentivos.