La investigación sobre las presuntas irregularidades en el uso de combustible y en la adquisición de pertrechos ha trascendido los ambientes del Ejército peruano y ha llegado a otras armas. La Contraloría General de la República ha iniciado una nueva indagación sobre esta materia pero, esta vez, las instituciones que están en la mira de los peritos especializados son la Fuerza Aérea del Perú (FAP), la Marina de Guerra y la Policía Nacional (PNP). Fuentes consultadas por Perú 21 informaron que, en enero pasado, el contralor Genaro Matute Mejía autorizó la ampliación de la investigación iniciada hace unos meses al Ejército y, en la resolución emitida, se aprobó incluir en las pesquisas a las demás instituciones castrenses, así como a la PNP.