"Si el gobierno del presidente Alejandro Toledo no me otorga la independencia y autonomía que necesito para cumplir con mi función, renunciaré al cargo de defensor del Estado", advirtió ayer el procurador ad hoc Antonio Maldonado.Precisó que su nombramiento es un compromiso no negociable de lucha contra la corrupción."No he venido a realizar protagonismos de carácter personal con aspiraciones subalternas o carácter político. He venido a trabajar para fortalecer la institucionalidad del Estado peruano", manifestó.El procurador sostuvo que el jefe de Estado tiene la obligación de actuar con transparencia, como lo haría cualquier otro ciudadano, en la investigación de la presunta falsificación de firmas de Perú Posible.